Llegó el Solsticio de Verano (para el hemisferio norte)
Así para el observador geocéntrico el Sol salga todos los días por el oriente, no se puede desestimar que día tras día lo hace por lugares diferentes con excepción de la temporada solsticial en donde aparece dos veces por un mismo sitio. Los antiguos observadores del cielo al referirse a este acontecimiento estelar emplearon la palabra Solsticio (Sol – Quieto) con el fin de hacer mención a que el sol aparecía dos veces por el mismo lugar; y dado que la clave de todo no precisamente se encuentra en conocer la dinámica celeste sino en interpretar sus alcances, sale a relucir una reflexión de gran estima como es que si el sol se detiene, de la misma manera los seres humanos entramos en ese escenario que nos sugiere hacer una pausa en la rutina cotidiana con el fin de mirar en perspectiva lo que nos ocurre y quizás de encontrar otros argumentos para conectarnos con lo que nos corresponde vivir. Igualmente los griegos lograron apreciar durante esta fecha la presencia de unas poderosas energías que les indujeron a valerse de la frase “La puerta de los hombres” con el fin de reiterar el valor de lo sagrado y de las posibilidades que el ser humano tiene de entrar en sintonía con otras dimensiones.
Solsticio de verano para el hemisferio norte
Los lugares de mayor significación en la dinámica terrena y humana, los constituyen tanto los trópicos (Cáncer y Capricornio) como la línea ecuatorial, los cuales son puntos estratégicos en el sentido que cuando el sol orienta hacia ellos sus rayos en forma perpendicular señala la presencia de un cambio estacional, y precisamente el 21 de junio de 2023, el Sol logra su máximo nivel de elevación dando pie así a que se produzca el Solsticio de Verano para el hemisferio norte y el de invierno para el sur.
El libre albedrío
La insistente observación por parte de las culturas antiguas sobre la congruencia entre lo cósmico y lo terreno, les permitió encontrar referentes con el fin de darle a su paso por este mundo un sentido más trascendente. Llama la atención que entre sus investigaciones contemplaron como de gran estima las fechas solsticiales ya que pensaban que la aparición dos veces del Sol por el mismo sitio era una señal del cielo que les inspiraba para pensar que las ruedas de la vida se detenían y que el ser humano contaba con significativos niveles de libre albedrío para tomar las riendas de su realidad. Por esa razón se puede decir que estamos ante un período en el que se cuenta con potestades para recomenzar de ceros y para acceder al poder del ave Fénix que duerme en nuestros corazones.
Todos los años
En realidad todos los años el Sol logra acceder al punto más alto de nuestro planeta cerca al día 21 de junio lo que por supuesto para las zonas en donde las estaciones se manifiestan conlleva a la presencia de una variedad de sucesos trascendentales que alteran el fluir de la dinámica vital por un lado y por otro a entender que el ser humano está en plena sincronía con los relojes biológicos propiciadores de la vida, lo que hace entrever que cada vez que estos acontecimientos estelares se hacen presentes, existen una serie de cambios energéticos y emocionales de gran significación con los que vale la pena sintonizarse.
Cuando el cambio gana la batalla
El paso de una estación a otra constituye un asidero de orden estelar que nos recuerda que todo tiene un inicio y un término y que el ser humano debe estar preparado para los cambios.
Las raíces
A la luz de la etimología, el latín se convierte en un referente para develar los alcances de esta palabra lo que nos permite apreciar que solstitium, significa "el sol quieto” o “cuando se detiene el sol” o también “cuando el sol sale dos veces por el mismo lugar” como una temporada en donde la naturaleza declina a unas verdades precedentes y se dispone a vestirse de un nuevo ropaje con el que pretende convertirse en la fuente de inspiración de los siguientes tres meses.
La fecha
Es de notar que las antiguas civilizaciones realzaron estas fechas y les dieron una connotación sagrada por lo que se dispusieron a realizar en ellas múltiples actividades ya que consideraban que si la naturaleza se llenaba de regocijo por la disposición que le caracterizaba para vestirse de otra manera ante la llegada de una nueva estación, los seres humanos de la misma forma deberían sentirse en sintonía con este acontecimiento para lo cual realizaban prácticas de diversa índole según las creencias presentes en cada rincón del planeta. En otras palabras, durante aquellos tiempos el ser humano tenía mayor conciencia de esa conexión manifiesta entre el cielo, la tierra y de la expresión cíclica que los cobija. En este año 2023 el solsticio de verano coincide con el día 21 de junio a las 09:59 am para el meridiano 75 W.