Zodiaco

La oscilación que se hace manifiesta en el inicio de los signos y que conlleva a la aparición de diversas fechas como referencia de su punto de partida, originan una gran incertidumbre entre quienes han nacido especialmente en las fronteras de ellos, ya que no saben a ciencia cierta a cual pertenecen o bajo cuál han nacido. 

Existen varias vertientes en las que es factible ampararse con el fin de hurgar en este ancestral vocablo de allí la importancia de detenerse en cada una de estas palabras y de acudir a sus raíces etimológicas con el fin de develar sus alcances.

El zodiaco trópico se ampara la traslación de la tierra y tiene presentes las fechas solsticiales y equinocciales como sus referentes estructurales. La clave de su valoración se encuentra en el anual desplazamiento del sol por los signos y del retorno a su punto de partida que son los cero grados del signo de Aries. Su importancia estriba en que marca la pauta sobre el surgimiento de las estaciones y de los grandes cambios en los procesos vitales de la tierra.

El zodíaco sideral cuenta con múltiples variaciones porque permanece en permanente movimiento, lo que exige realizar ajustes y redefinir permanentemente sus puntos de partida. Tan es así que en India los estudiosos del tema indican que en la actualidad hay una diferencia de 23° entre los cero grados del signo de Aries con los cero grados de la constelación de Aries.